miércoles, 8 de agosto de 2012

I


"Encima de la montaña perpendicular había visto el giro completo de sesenta soles. La visión de la libertad eterna era mía para siempre. La ardilla se perdió entre las rocas y surgió una mariposa. Así de sencillo era. Los pájaros revoloteaban alegres por encima de la cabaña; contaban con un camino de dos kilómetros de moras hasta la línea de bosques. Fui por última vez hasta el borde de la Garganta del Rayo. Aquí, sentado el día entero a lo largo de sesenta días, entre la niebla o a la luz de la luna o del sol o,en la oscuridad de la noche, había contemplado los retorcidos y nudosos arbolillos que parecían crecer en el aire, en la pura roca."




No hay comentarios: