Escombros

Los escombros de tu voz bailan sobre la almohada, saltan alto, se enrriedan en mi pelo, hasta que son percibidas por mi sentido auditivo.

Aún con ojos cerrados me pregunto si es mi imaginación, o si son parte del final de un sueño.

Si fuera un sueño, yo abriría los ojos y ahí estarías vos.

Sentado en la cama, mirándome.

Pero no...

Abro los ojos y sólo veo la oscuridad que reina en la habitación, un rayo de opaca luz que se filtra por la ventana, y lo único que siento es el frío que se pierde entre las sábanas.

No estás.

Cierro lo ojos.

Pasan los minutos, unos últimos pensamientos y se cierra el telón.

Pero te vuelvo a escuchar.

Son tus palabras, es tu canción, es tu voz.  

Ahí estás.